Al comenzar el semestre y recibir mi tira de materias, vi cuales eran las que teníamos que cursar y siendo honesta la que menos me llamó la atención fue la de Filosofía y Ética Profesional y no por restarle importancia o valor, más bien por pensar que iba  a ser la menos interesante de todas.

Conforme fue avanzando el semestre al ir cursando cada parcial y conociendo cada tema, pude darme cuenta cuan equivocada estuve ya que puedo decir que es por demás  una materia muy entretenida, yo sabia un poco del tema, recibí una clase solamente sobre Ética y Valores ya hace mucho tiempo, en esa asignatura tocábamos más el tema de los valores éticos y como es que nos permiten medir nuestro comportamiento para lograr el bienestar común y, una convivencia sana y armoniosa con la sociedad. En cambio ahora aprendí sobre la ética como una parte de la filosofía que estudia el bien y el mal relacionado con el comportamiento humano y con la moral.  La filosofía tiene un nuevo significado para mí, de ser una materia más que simplemente tengo que aprobar, ahora es una forma de pensar profunda y autónoma que me hace reflexionar sobre mi realidad, mi naturaleza y del entorno que me rodea. Me hace pensar en mis valores mi moral y mi sentido de justicia y esos mismos pensamientos me llevan a cuestionarme, si,  ¿lo que hago va en contra de mi moral, de mis valores? sé que quiero construir mi propia filosofía de vida, gracias este aprendizaje he podido evolucionar a un nivel crítico en el que analizo las cosas más profundamente y de manera objetiva e imparcial. Quizá  me hace falta madurar mis sentimientos para que estos no intervengan en mi juicio y en mi raciocinio, me hace falta mucho tiempo, mucho que aprender, pero sin duda este es el comienzo de algo nuevo que no quiero que acabe... 

Sin duda alguna no quiero que este tema quede solamente en una asignatura...